
Roma, 23 de noviembre de 2021
El Secretario General del Sínodo de los Obispos, el cardenal Mario Grech, ha intervenido esta mañana en la 75ª Asamblea General de la Conferencia Episcopal Italiana que se celebra en el hotel Ergife Palace de Roma.
Esbozando el camino sinodal que conducirá a la celebración del Sínodo de los Obispos en octubre de 2023, el cardenal Grech subrayó la importancia de desarrollar un estilo sinodal: "obtener resultados sin madurar un estilo sinodal relegaría a la Iglesia a una decepción que comprometería el futuro de la sinodalidad y de la propia Iglesia. Vuelvo a repetirlo: es mejor que el Pueblo de Dios en nuestras Iglesias se enfrente a la cuestión de fondo, en lugar de hablar de cualquier cosa, sin construcción y sobre todo sin dirección. Lo que cuenta es madurar una verdadera mentalidad sinodal; entender que verdaderamente "la Iglesia es constitutivamente sinodal", es decir, el Pueblo de Dios que camina unido, no sólo porque camina, sino porque camina sabiendo hacia dónde va -hacia la realización del Reino- y por eso se interroga sobre el camino a seguir, escuchando lo que el Espíritu le dice a la Iglesia. Estoy convencido de que el primer y más fundamental fruto de esta primera etapa del proceso sinodal es la convicción, madurada a través de la escucha mutua, de que la vida de la Iglesia comienza con la escucha, como consecuencia de ese redescubrimiento de la dimensión pneumatológica de la Iglesia que el Concilio nos ha devuelto y que nos compromete a los pastores, en particular, a la irrenunciable tarea del discernimiento".
En este momento en que la Iglesia celebra la primera fase del proceso dedicado a la escucha, el Secretario del Sínodo recordó: "La consulta del Pueblo de Dios es una acción que corresponde al Obispo como principio y fundamento de la unidad en su Iglesia. En virtud de su propia potestad, ordinaria e inmediata sobre el rebaño que le ha sido confiado, le corresponde abrir el camino sinodal en su Iglesia y acompañarlo, para que dé los frutos esperados".
Por último, el Card. Grech cerró su discurso con una petición concreta a la CEI: "Por ello, pido a esta Conferencia Episcopal otro compromiso: dar ejemplo en la fase de discernimiento. Ayuden a todos a comprender que no es un trabajo que se le confía a otra persona, sino que ustedes mismos examinan el material. Encuentren una forma verdaderamente colegiada de "discernir" las aportaciones de las diócesis. La síntesis que ofrecen al Secretariado debe ser realmente el fruto de la escucha de las Iglesias en Italia. Este acto de discernimiento ayudará a comprender -estoy convencido- la naturaleza colegiada de las Conferencias Episcopales, en el marco de una Iglesia constitutivamente sinodal. Este es un tema que merece un estudio cuidadoso, para que el proceso sinodal pueda garantizar un verdadero ejercicio de sinodalidad, colegialidad y primacía. Mortificar uno de estos aspectos es debilitar todo el proceso sinodal".
El discurso del Secretario General del Sínodo de los Obispos fue seguido de una amplia, sincera y fructífera sesión de diálogo con los obispos de la CEI.
El discurso del Cardenal Grech sólo está disponible en italiano.